martes, 30 de octubre de 2012

Cuando el ser humano tiene la posibilidad -decidido por él- de tener inteligencia artificial o mecanismos de información -siempre programados por él-, a veces se atreve a comparar esa inteligencia falsa con una natural u orgánica.

Pero siempre las diferencias serán:

- El ordenador ni vive ni se adapta orgánicamente a lo que el medio natural le impone (hambre, saciedad, nuevos deseos o imprevisibilidad).
- El ordenador no conoce por él mismo, no decide conocer algo libre o imprevisiblemente; y no tiene capacidad de renuncia.
- El ordenador no desarrolla una emocionalidad ni intuitiva ni libre para crear arte o belleza.
- El ordenador no es capaz de comprender lo inútil de algunos de sus actos (de su automatismo o repetición, por ejemplo).
- El ordenador no posee las intenciones de ser algo más que ordenador ni llegar a lo trascendental.

No hay comentarios: